Subirse a un taxi. Ese es un deporte extremo. Aunque el señor fue muy amable y me encanta subirme a los taxis que rebasan a todo mundo, mis nervios no lo aguantaban, debió ser la desvelada.
He platicado poco de mi trabajo con ustedes, les he dado frases vagas y de Cliché (Yo te lanzo al estrellato nena), he de remediar eso narrándoles el día de antier hasta las cinco de la mañana del día de hoy.
Casting empieza cuando una productora tiene un comercial en el horno, te llaman por teléfono y te dan el perfil que buscan. A partir de eso, uno abre el casting a las agencias de modelaje y de actores (no es lo mismo un modelo que un actor, definitivamente) y estas se encargan de mandarte a la gente para que uno tome el video con lo requerido, después se hace una edición un tanto grande (dependiendo del número de personajes) que se le entrega a la productora. Es el primer recorte, que es básicamente, mi trabajo.
La productora da la lista de la gente que le gustó, se vuelve a editar ya más leve. Se da una junta con la agencia de publicidad, la productora y la gente de casting, donde se vende al talento que sea más adecuado para la idea que tienen pensados los creativos. Éste es el tercer y último recorte que se le presenta a la empresa en sí, sea Coca Cola o Maseca.
El proceso dura dos semanas, entre las juntas, el número de ediciones y finalmente, la filmación (o grabación, dependiendo). Eso sólo es casting, no he de platicarles de Arte, Vestuario, Locaciones, Producción… tardaría un rato en esta introducción.
El cliente, siempre tiene la razón.
Suena como fluido el rollo, ¿no?. Ajá… si, así también me lo pintaron de bonito.
Día de antier.
Tenemos tres proyectos: champú, refresco y gobierno. Dos están fluyendo tranquilamente, sin embargo recibimos una llamada de parte de la productora acerca de su casting de champú: “Necesitamos más teens y más señoras que parezcan mamás joviales de una niña de 15-17″.
La llamada fue entre las 10 de la mañana y las 12 del día. Eso nos da tres horas para buscar gente en cassettes de otros proyectos que no hayan venido al casting, para hablarles por teléfono a sus agencias y nos hagan el favor de mandárnosla… las agencias de modelaje son extremadamente puntuales para irse a comer… algunas no, y son muy lindas y nos esperan. El cassette se entrega mañana porque tiene que ir a Nueva York para revisión de agencia.
Los otros dos casting siguen fluyendo tranquilamente… no hay problema, uno se sienta, empieza a llamar a las agencias para que insistan con los perfiles que faltan y cubrir por completo el casting de champú… oh, espera, suena el teléfono… la productora que está encargada del casting de refresco, dice que vamos bien en los chavitos…
pero siempre hay un pero.
Los chavitos, aparte de que tienen que tener entre 7-9 años, deben ser latino Internacional(piel blanca o morena, cabello y ojo oscuro). Eso, obvio, ya lo sabíamos… lo que no sabíamos es que de preferencia debían ser actores y a huevo: gimnastas.
Debe haber un par que esté alzando la ceja y esté pensando: “No sea mamón”, debe haber otro par que esté pensando: “Wey… pues les dices que no hay y ya” y algún otro ojete se debe estar riendo porque parece increíble.
Casting no puede decir que no hay… hasta que de veras no hay. Yo no estoy autorizado para decir: “No Hay”.
Las ventajas de ser el editor, ¿verdad?
Así que, organicemos. Una chava que trabajaba con nosotros, que se encargaba de los teléfonos, se le ocurrió renunciar unos días antes. Así que me tocaba hacer las llamadas para el casting de champú… tenemos operadores de cámara en cada foro, uno para champú (Juan Carlos), el otro para refresco (Alfredo).
Cheques, el encargado de listas, está entregando un cassette de un casting de gobierno, en otra productora. Es la persona que por lo regular se encarga de la puerta y de las listas, pero no podrá hacerlo, así que también tendré que hacerlo yo.
¡Ajajá! ¡Quedan los niños que son gimnastas y actores y también tocan la flauta con el culo! Bueno… esos, afortunadamente queda Josefa Guerrero. Ella se dirige a los gimnasios donde se entrena esto y espera llevar la bendición de Dios.
Llega Jorge Carrillo con su sonrisa, le pregunto donde andaba, él me sonríe encantador como siempre y dice: “¿Usted sabe porque puse mi empresa?”, yo respondo: “Para que no le pregunten donde anduvo, señor”. Pregunta tonta… finalmente, me ayuda con los teléfonos y así, medio vigilo la puerta y las listas de la gente que pasa al foro.
A los niños que llegan para Refresco se les pregunta si fueron gimnastas o mínimo, han hecho comerciales antes subidos a un arnés. No tenemos suerte… sólo uno en todo el día.
Lentamente, termina el antier. Se hace un copiado de los dos VHS y se mandan a la productora. Se cierra a las 10 de la noche, porque todavía estaba llegando gente para los dos proyectos y… ¿gobierno? bueno, todavía no me toca preocuparme, el encargado de ese proyecto no ha abierto la boca.
Ahora, si ustedes gustan, acompáñenme al ayer.
Habla la productora de Refresco: “jaja, estábamos bromeando… mira, con que sean chavitos más o menos atléticos, no necesariamente gimnastas, lo importante es tenerlos”. No dijo eso exactamente, pero es el medio… en este medio todo es urgente, todo es para mañana y todo es como dice el señor director y el señor cliente.
Uno se tranquiliza, ¿no? Nel, mis tanates… porque el que habla de la productora añade unos minutos después: “Nada más que una cosita, necesitamos ver el casting antes de las siete de la noche”.
El casting, termina oficialmente a las seis.
Por razones de seguridad y sentido común, no llevamos nunca los casetes originales, por lo general se tienen que hacer copias al método antiguo, de VHS a VHS, dos horitas por casete.
A veces me relajo y pienso que somos o dioses… o los idiotas más grandes del mundo.
Casting de Shampoo, fluye tranquilamente, se han conseguido más opciones y ya dieron una lista de gente para el segundo recorte. Se hace, se entrega.
La preocupación se enfoca en el Refresco ahora, se hacen los copiados con una paciencia impresionante. Josefa todavía tiene que ir a otro gimnasio más. Alfredo y yo, tenemos que encargarnos de vender a los niños que no son gimnastas.
Alfredo es novato en las juntas y yo no soy el mejor del mundo, pero al menos tengo más experiencia. Me he dado el tiempo de acompañar a Jorge y a Josefa, que son los mejores vendedores de humanos en el mundo. Así que me decido a acompañar a Alfredo, sólo para darle unos empujoncitos.
Claro, empezamos a bromear en el coche… a pesar de que parezco un viejito amargado en ocasiones… debo bromear. Si no bromeara e hiciera reír a los demás, o me riera de los chistes ocasionales que hacen mis compañeros de trabajo… ya hubiera renunciado. Uno necesita desestrezarse… si ya comprendieron toda la tensión, también deben comprender los chistes idiotas…
Realismo mágico, la vida… ustedes saben.
Continuando: vamos bien valientes los dos. A las 7:20 estamos en la productora, nos atienden a las 7:40. Alfredo no abre la boca para vender a nadie y entonces yo empiezo a abrir la boca para vender a quien tuviera enfrente, que yo estuviera plenamente seguro que pudiera funcionar. Estoy rezando en mi interior para que llegue Josefa de videar en el gimnasio y venga a la productora.
Mis rezos son escuchados y ella llega aparecida del cielo como una virgen. Josefa ya lleva 18 años haciendo casting… por lo tanto habla con aladas palabras al asistente de dirección y vende… vende… VENDE!! Oh si! ORGASMO!!!!
Todo fluye de nuevo… hasta que escucho: “Me pueden EDITAR (osease … yo) estas sesenta y tres personas para las ocho de la mañana de mañana?”
Mi reloj decía 9:45… obviamente, deseché todas esperanzas de regresar a cenar a mi casa.
Mal, mal, mal.
Regresamos Alfredo y yo a la oficina, decidimos cenar algo. Josefa nos acompaña un rato y decide irse… Jorge dio órdenes de: “No nos madreemos todos al mismo tiempo, si no uno por uno…” Lo cual es muy bonito.
Alfredo y yo nos madreamos. A la 1:15 ya teníamos en la computadora el video de las 60 personas. A la 1:45 ya lo tenía editado y pasando a video. Acabó a las 2:30 y entonces me tiré al piso a tratarme de dormir… me hice el dormido, más bien, que lo demás lo terminara Alfredo…
unas simples listas nomás… bueno y todavía faltaba editar lo de los gimnasios…
4:00 de la mañana, parece que si dormí una hora después de todo. Escucho que Alfredo sube y yo subo con él, nos ponemos a editar lo del gimnasio con mucho cuidado, para que la Productora pudiera entender el material y reconocer a los niños. 6:00 de la mañana terminamos.
Y ahora, aquí me tienen, en casa… esperando que me den las 9:30 para bañarme, vestirme e ir a mi oficina a las 11:00… y ahora que recuerdo… del casting de gobierno todavía no se nada.