Encender el cigarro

Ya tengo dos trabajos más que entregar. De tres cuartillas, en inglés (Historia Literaria II). Se agregan al trabajo que tengo que hacer del outline de mi thesis statement, para mi clase de inglés precisamente. Tengo que leer The Wasteland, la clase de Collin lo requiere. Tengo que hacer otro trabajo de Roa Bastos para la clase de Argel. Un trabajo más para la clase de Lingüística, de este viernes… este es sencillo, tan sólo una cuartilla. Pero juntitos todos, me hacen pensar lo mucho que me falta.

Tomar el café

Se han agregado, repentinamente como caídos del cielo, otros dos castings. Ya tengo un pendiente menos con lo de Philips, sin embargo, viene Harmon Hall… tres personajes, primera edición querrán alrededor de 45-60 personas. Tendré que regresar de la escuela y llegar a mi trabajo a las nueve de la noche para hacer esa edición para mañana. No podré hacer el trabajo de Lingüística para esta semana, tendrá que esperar para mañana. Tengo lo del Thesis Statement taladrándome el cerebro. Probablemente… pueda pedir apoyo…

Abrir la Coca Cola

Otro casting más. Piden jovenes de 12-16 que puedan hacer piruetas en el agua (Skii acuático, ¿así se escribe?), que divertido… Juan Carlos irá a Acapulco mañana a hacer scouting. Feyo probablemente haga scouting en Veracruz. Josefa, no lo sé, pero ella no sabe hacer mi trabajo, ella no me puede ayudar. Se abre casting también en la Ciudad de México. Necesitamos entre tres y cinco chavos que puedan hacer eso. Maldición, la profesora de inglés me regresó un trabajo el martes y me dijo que debía re-escribirlo, eso sumado al Movie Review que tenía que hacer. El apoyo se ha ido al carajo.

Jorge empieza…

—T-T, tenemos que entregar la edición mañana.

Y yo ando pensando en todos mis pendientes. Obvio que ya sabía de la edición. Me distraigo haciendo una lista, mi jefe vuelve a insistir repitiendo la frase. Respondo distraído y después agresivo, que tengo muchos pendientes. Habló la señora de la renta antier, ya nos retrasamos 15 días. 15 días. 15 días. Ya nos amenazó una vez con sacarnos… pero no me alcanza, sencillamente no me alcanza. Mi madre sigue en su juicio. Se está retrasando más y más. Y yo tan sólo pienso en que no alcanza. Y los trabajos pendientes. Y la edición que me hará desvelarme mañana.

Un pastelito de chocolate

—T-T…

Estoy aquí desde las nueve y media de la mañana. Ya son casi las diez de la noche. He estado aquí doce horas. Doce horas en las que no me puedo sentar y leer mis pendientes. Doce horas en las que no puedo adelantar mis trabajos. Doce horas, de las cuales siete o seís están muertas. Doce horas, de gente preguntando en el teléfono: “¿Dónde es el casting?” “¿Tienen algún casting?”. Tomen su turno, yo también necesito dinero y no es mi trabajo responderles el teléfono.

He adoptado la postura de que si hablan antes de las 11 de la mañana, contesto con un: “Banco de México, ¿buenos días?”. Escucho como cuelgan y sonrío. Me pone de buen humor una hora o dos.

—Jorge… sé que tengo que hacer la edición. Sé que se tiene que entregar mañana. No te puedo decir a que hora se entrega, porque ni tú, ni yo, sabemos a que hora nos darán la lista de edición. Ahora, ¿me puedes decir, la neta? Si me dices que mañana, saliendo de la escuela tengo que regresar a editarlo, sin que me pidas horas, sabes qué estoy aquí. ¿Alguna vez te he fallado con alguna edición?

Jorge se va. Cheques se queda callado. Se tensa el ambiente… un poquito nada más. Sigo haciendo mi lista, me distraigo con mi lista. Collin, Nati, Argel… si… Mamá, renta, dinero del coche, no hay para cenar en casa, pura panacea de café y cigarros. Tengo quince pesos en mi bolsillo que me tienen que durar hasta el viernes.

Termino mi lista. Voy a la cocina y le pido una disculpa a Jorge.

Trato de explicarle todo lo que pasa, y no entiende. Sólo sabe decirme: “Tómese un café, siéntese, relájese y disfrute a su madre”.

Disfrutar… a mi madre. Bien. Ella sabe que tiene todas las de perder, por eso me ha consentido mucho estos días. Y yo sé, que lo más prudente, es no meternos en líos. He sido lo más diplomático, paciente, tolerante espectaculante, posible. Ya no puedo. Sencillamente ya no puedo.

Hughes, Blake, Yeates.

Pero no me rindo cabrón, no me rindo.
No sé rendirme carajo.

No-me-rin-do.
No-me-rin-do.
No-me-rin-do.
No-me-rin-do.

Solo estoy un poquito cansado, nada más.
Solo un poquito.
Mañana veré todo con más calma.

Trataré de no pensar en Blake, ni Hughes. No me puedo dar lujos.

Haré el “thesis statement” de lo que vimos de una autobiografía como ficción o algo más. Es buen tema, me interesó.

Mañana, mientras se hace el render, bien puedo hacer mi último trabajo de Lingüística.

Probablemente no elijan tantos, probablemente muevan la junta.

Debo apreciar el trabajo… lo necesito en este momento. Tú trabajo es divertido, siempre lo ha sido. Sólo hubo un cambio de enfoque, pero lo necesitas y te gusta. ¿Puedes pedir más?

Lo de la renta, algo se solucionará… siempre hay una solución. Siempre hay vida.

Si dejo de fumar, tendré más dinero. Piénsalo.

Mi madre puede seguir haciendo lo suyo, ya entendí que a ella no se le puede hablar ni civilizada, ni salvajemente. Cada quien sabe donde está parado, no importa cuan locos se hagan.

The Wasteland… diablos, es difícil. Muy difícil. Espero no pida trabajo de eso.

Poco a poco. Paso a paso.

Cierra los ojos… no pienses en nada.

Cierra los ojos… tranquilizate…

Cierra los ojos… apaga ese cigarro… no te ayuda…

Cierra los ojos… respira profundamente… aire, necesitas aire…

Ya estás respirando otra vez, ¿ya ves? No fue tan difícil.

Cabeza fría. Recuérdalo.

Anda… cabeza fría… cabeza fría…