Me gusto todo: el color de las hojas, el olor del libro, el material de la portada, la tipografía, la organización. Realmente fue una experiencia agradable. En mi segunda lectura ya comprobé que mis cuentos preferidos hasta ahora son el de semidios, el de guffo y el de kabeza. El de control zape también me gusta bastante, porque me recuerda mis días en el metro y ese temor sutil de que algún día se caerá sobre nuestras cabezas (¿Debí poner spoiler alert?). Todavía no termino esta segunda lectura, pero pronto.