¿Soy el único que escucha un cangrejo? Clic, clic, clic. Así suenan los controles cuando viciosos videojugadores, matan a sus rivales usando los poderes del chi para quemarlos. El clac, clac, clac, ha reemplazado el poder de los puños, la meditación, conjugar la energía de la naturaleza en un punto central para la acumulación y la liberación exitosa de un buen madrazo. También es el sonido de los nuevos gurús, mientras leen todo el internet a toda velocidad. Digo leer, porque ahora con los videos, el mundo se ha llenado de pendejos que ya no necesitan escribir y el mundo nos hace más pendejos porque asumen que tenemos el tiempo para observar los videos explicativos que dan instrucciones o nos venden las nuevas aplicaciones. El clec, clec, clec, de un hombre que fuma y escribe. Me gusta leer y escribir. Me gusta llegar a leer, no abrir un video de youtube que supuestamente me hará feliz a cambio de tres minutos de mi tiempo. Sólo en las noches, cuando todo termina, puedo entonces sentarme a decidir que quiero… ver o leer, ver o escribir, escuchar o tomar, fumar o esperar, erectar o eyacular. ¿Qué acabo de decir? Esos juegos horribles, juegos vulgares y poco discretos. Cluc, cluc, cluc, hacen las gallinas. Clac, clac, clac, las camas inquietas.
- Inicio
- ¿Quién escribe?
- Libros
- Traducción
- Las nueve vidas de una gata por Charles H. Bennett
- El perico infiel por Charles H. Bennet
- La rana quería ir de fiesta por Charles H. Bennet
- Dos fábulas y una canción de cuna por Charles H. Bennett
- El príncipe rana y otros cuentos por Walter Crane
- Cenicienta y otros cuentos por Walter Crane
- La bella y la bestia y otros cuentos de Walter Crane
Select Page