Este librero tambien contiene varias de las ediciones Porrúa y según me doy cuenta, una segunda edición de los “Los indios de México” (Fernando Benítez). También en él tengo algunos libros pequeños que rescaté, que tratan de la artesanía mexicana. Cuando en casa vendíamos joyería y artesanías, nos fueron bastante útiles para aprender algunas cosas. Este librero es el “Tomo 2” definitivo, porque muchas veces sólo he logrado salvar los segundos tomos de una colección más grande. Cosa curiosa. Así, por ejemplo, se ve el segundo tomo de “Las mil y una noches”. También el segundo tomo de “Historia general de México” (y este libro lo usé mucho, en algún momento de mi vida, cuando sentía una gran pasión por la historia de México).

Los libros aquí, son: “El Ramayana”, “El arte de amar” (E. Fromm), “Las mil y una noches – Tomo II”, “Harry Potter y la cámara secreta” (J.K. Rowling), “La perestroika” (Rius), “Historia general de México”, “Las once comedias” (Aristófanes), “Cien años de lucha de clases (1876 – 1976)”, “Antología de la literatura mexicana” (Ma. Luisa H. Ibar), “El Decamerón” (Bocaccio), “Historia del mundo contemporáneo” (libro escolar), “La Iliada” (Homero), “Las siete tragedias” (Esquilo), “Las siete tragedias” (Sofocles), “Los indios de México” (Fernando Benítez), “La interpretación de los sueños (2)” (Freud), “Cuentos mexicanos” (antología), “En el país de los mayas” (Pierre Ivanoff), “Norse Myths” (Kevin Corsley Holland) y “Retrato del artista adolescente” (James Joyce). Ah, y la serie de artesanía mexicana. Dos ejemplos:

coleccion-artesanal

Son como folletos bonitos, y buenas referencias.

Ahora, ¿por qué tanto interés en tener… poseer, estos libros de tragedias y comedias griegas? Bueno, mi profesora, una fumadora compulsiva, que tenía un excelente don para dar clases, insistía en que la mayor parte de nuestros entretenimientos culturales no eran nada nuevo y que en sí, se los debíamos a los griegos / romanos. Nos daba ejemplos comparando telenovelas y programas de humor (como el chavo del ocho) y luego nos hacía abrir uno de estos libros y leerlo. A medida que pasaban sus clases, me preguntaba: ¿De verdad? y luego leía, confirmaba, mientras me frotaba la frente y prendía un cigarrillo. De verdad, me respondía. Mis breves lecturas de Safo, Sofocles, Esquilo, Virgilio, Aristófanes, etcétera… me regalaron una tolerancia amplia respecto a los deseos de la gente y me hicieron entender que, de verdad, no hay una historia nueva bajo el sol. No existen las historias nuevas. Lo único que cambia es la estructura. En toda historia, todo cuento, hay un trasfondo muy básico. Un sentimiento humano que, a lo largo del desarrollo, adquiere los matices que provienen de la experiencia de vida del escritor.

Luego los libros de historia de México y sobre todo ese “Los indios de México”, son importantes para comprender donde estamos hoy. Benítez es importante porque es, casi, el único registro de nuestra cultura antes y durante la conquista. La única referencia permitida. Abrir la mente y saber un poco de todo, adquirir un conocimiento general de las cosas, profundizar en ellas, unir los puntos. Es algo que me gusta. Es algo que, mi biblioteca pobrísima, me permite en cualquier momento. No sólo las lecturas son apacibles, también son una lucha por aprender, por entender y por saber dónde estoy metido a través de palabras. Los libros son esos pilares que están alrededor de nosotros, que sostienen los edificios sobre los cuales vivimos y trabajamos, y nos mantenemos y nos gobernamos. Pequeña reflexión derivada de estar mirándolos y tocándolos estos días, continuemos, quedan muchos libros por descubrir.

norsemyths

Éste es uno de mis libros preferidos. Los mitos nórdicos, contados en una forma más relajada. En su prólogo el autor insiste en que los quiso re-escribir para tiempos modernos, platicárnoslos. Éste creo que lo leí a mis dieciocho años, desmenuzando el inglés poco a poco. Los cuentos más emocionantes, debo admitirlo, son cuando Loki y Thor están involucrados. Hay uno todavía más entretenido, donde Odin también sale envuelto en las artimañas del dios travieso. Pronto haré una relectura (tan pronto termine todos aquellos que no he leído, tal vez nunca). Todavía recuerdo el penúltimo cuento, el Ragnarok, donde se unen esas tres fuerzas destructoras para romper el mundo y darle un nuevo comienzo. Loki, Fenrir y Jörmungandr. ¿Y el final? Bueno, el final somos nosotros, tratando de vivir con esos dioses y miles de dioses más, guiando nuestros pasos.