Si lo prefieren, también hice una reseña en video.
Insanely Twisted Shadow Planet es un shooter de plataformas (muy a la metroidvania) que surgió de la mente de Michael Gagné. Sí, yo tampoco sabía quién era él hasta que visité su sitio web y lo descubrí como un héroe oculto, una persona que ha participado en varias producciones animadas que se recuerdan con cariño o que todavía son vigentes. El señor tiene una cantidad impresionante de premios por su vida en el medio. Esta es la incursión de dicho personaje dentro del mundo de los videojuegos.
Una de las pequeñas fallas (y en esta ocasión, no tiene mucha importancia) es el convencionalismo de la historia: tú controlas a un alienígena que debe salvar a su planeta de las sombras. Como un gimmick, escondidos por todo el mundo, hay pequeñas ilustraciones y animaciones que pretenden ampliar la historia. Dudo que alguien las consiga todas en su primer paseo por el juego. También dudo que juntas ofrezcan una buena, interesante, o distinta explicación de lo que está pasando. La historia es fácil. No vale la pena romperse la cabeza con ello.
Los enemigos de sombras suelen ser orgánicos, perfectamente animados. Toman inspiración del pulp fiction, de Tim Burton (o, mejor dicho, de su papá Edward Gorey), de Cartoon Network en los noventa (cuando era bastante propositivo en sus ideas). A pesar de que este juego consta de colores estridentes, quizás fue inspirado por la popularidad de los contrastes en Limbo. El juego tiene varias capas de ilustración. En el fondo puedes encontrar pequeños momentos bien ilustrados; estos momentos belleza al detalle y sirven como un lienzo para darle protagonismo a nuestra nave espacial. Consta de un número bastante amplio de escenarios y cada escenario tiene su propia fauna, su flora, sus colores. Los enemigos y el mundo que manipulamos para vivir esta historia fueron elaborados amorosa y meticulosamente.
El juego asombra por su espíritu dinámico. Es bastante sabroso controlar la nave para explorar el mundo oscuro. La fluidez de las animaciones junto con el placer de manejar los controles maximizan la experiencia del juego. Están las armas convencionales y las armas chistosas: una sierra eléctrica, por ejemplo. Las armas que descubres convierten a tu nave en una especie de navaja suiza y con estas herramientas abrirás nuevos lugares para descubrir más cosas que te permitan más accesos (sí, pues, un metroidvania). El juego, por lo mismo, da la impresión de ser muy largo pero no es así. Es una aventura divertida, corta (de seis a doce horas, calculo) que es tan deliciosa como juegos de mayor presupuesto.
En resumen: ¿Recomiendo Insanely Twisted Shadow Planet? Sí. Si viene en un bundle, no lo duden. Si les gusta este tipo de aventuras o son fanáticos de los juegos bellos (y también jugables), tampoco lo duden. Es una aventura que vale la pena.