Filo | Canción para el desvelo

Página 52

Alzó la mano izquierda a la altura de su pecho para protegerse y preparó la mano derecha para dar...

Abrió el casillero con cuidado de no hacer ruido. Metió sus manos para sacar a Casiopea pero tan...

Había llegado el momento. No podía quedarse más tiempo o se desharían de él. Notó como día con...

Tres años después, los draconianos recuperaron el cielo y lo hicieron frente a Mateo. Y aunque...

Filo le pidió a Mateo su recibo de papel y un último favor: —Despacha a una última bestia antes de...

Recordaba a su último “Otro”, como sus colegas los llamaban. Un zángano duro, fuerte y hábil. Las...

Mateo estaba avergonzado: nunca consultó con Casiopea porque no sabía que podía hacerlo. Respondió...