Ingredientes necesarios.
Un bote de cajeta.
En caso de la persona femenina: Una vagina.
En caso de la persona masculina: Un pene.
También se puede aplicar estimulación anal.
Si hay temor hacia los genitales, nada más abran la boca y digan ¡AH!
Si eres transexual… pues me da gusto por vos. Sé feliz, sé creativo.
Instrucciones de primera mano.
Despojarse de la ropa.
Abrir el botecito de cajeta.
A menos que te guste hacer porquerías en las sábanas, o los sillones, o donde haya tela –en general–, elige un espacio abierto y que pueda limpiarse fácilmente.
Ponte el botecito de cajeta en el vientre para fácil acceso.
Hunde los dedos en la cajeta y vulgaris dichotum est: atásquense puercos, que hay lodo.
Variantes.
Dependiendo de la zona erógena con la que estés más… cómodo (en sí, este manual es para la zona genital, pero la zona bucal y la zona anal pueden ser igualmente explorables), toma cajeta con los dedos y distribúyela uniformemente en la palma de la mano. Frota en círculos sobre la zona erógena de mayor valor en tu escala de prioridades.
Advertencias.
No lo hagas en la misma habitación donde haya un perro o un gato. (Nota para los zoofílicos: En realidad, no me interesa saber).
En caso de haber irritación, con agua o con un poco de leche.
Aliméntate sanamente.