O codicia. Miel de Zoé. No sabía que me gustaba esa canción. O el grupo en general. Algunas diez o quince imágenes alrededor de un actor principal. Estas imágenes son de todo tipo. De personas, de mujeres en cuatro, de chicas anime, mis caras que hago cuando despierto, los videojuegos que me gustan, o simplemente imágenes bonitas. Me gusta ese azar porque me despierta, me llena, me levanta y me pone a pensar desde cochinadas hasta reflexionar acerca del pasado.
Hoy nos la hemos pasado World of Warcraft en la oficina. Todos.
Si alguien quiere una invitación 10 días gratis para el juego, me avisa. Me restan 4 invitaciones, y hay servidor en Latinoamérica. No está nada mal. Pero les advierto: a las dos horas que jugué en mi invitación, me inscribí al juego de lo adictivo que resultó. Soy Festuerto en Quel’Thalas. Guerrero no-muerto. Um. Tengo una espada con el espíritu del oso que me da 3 de fuerza y 3 de agilidad. Um. No me permitan continuar. Tengo que enfermar y matar a unos granjeros, en un pueblito a dos o tres kilómetros. Um.
El flujo debe continuar.
Un charco de agua me parece triste. Eso cuando tengo ganas de pensar en las tristezas de un charco. Está quieto. Quieto nomás. Me gustan los ríos que siempre están moviéndose. Pensaba hoy que me casé, que tal vez había renunciado a una vida de vagancia. Hice cuentas, pensando en la cantidad de amigos quienes habían terminado viviendo en otros estados porque se les dio la gana. Pensaba en Cancún. ¿De no haberme casado? … ¿De haber tenido una educación más aventurera? … ¿De ser un verdadero guerrero no muerto, estaría yo viviendo en Cancún? Mi carne putrefacta bronceándose al sol. Rico.
-Llévese su espada nivel 14 joven, llévela bara baras. You gringuito, take this mojito shot with you and give me two hundred dollars. Ah, this sword level 14 for you for free.
De ser un aventurero, como mi guerrero, buscaría en las minas de Taxco para vender barras de plata. Eso hace mi guerrero cuando se siente apretado económicamente. También mata cantidades groseras y peligrosamente antinaturales de osos, leones, yetis, troggs y humanos. Soy una máquina de guerra. Ahh, mi vida de fantasía número 1, y mi vida de fantasía número 2.
Mientras tanto, en otra parte, la directora argentina dice lo siguiente-. Me gusta el casting, pero no me encanta -después de ver unas 200 personas. Tal vez más. Se suponía que ya no volveríamos a trabajar con ella. Incluso corrían los rumores de que no la traerían de regreso a México. Me encojo de hombros. Finalmente soy un espectador silencioso en este proyecto.
“Me lo follaría hasta el borde del dolor”, leo en un limbo… entre la vida de fantasía 1-10 y la vida real 11-20.
Follar hasta el borde del dolor.
Encantador.