Ayer encontré secretos de una
mujer. ¿En blog, en libro, fue oído?
No tiene caso. Ella me lo dijo:
–¿Ves como se dilata mi pupila?
–Me fascina cuando él me ahorca.
Imaginé un hombrecito sado…
tranquilito, pequeño, iracundo.
Si miran, no mata a una mosca.
–Me llama puta, jala mi cabello.
No sólo mi pupila se dilata.
Pedirle furia es abrir un sello”.
¿Si no tienes cuidado y te mata?
–En el orgasmo me ahorca, bello…
Nunca quise vida normal y casta.